Nunca le digas a un niño que los sueños no se hacen realidad. El podría creer que tienes razón.
No le digas que llorar es cosa de niñas, que se ve débil llorando, son sus sentimientos. ¡déjalo expresarse!
No le digas que jugar con muñecas o animalitos o peluches “es cosa de niñas”.
No le digas que si agrede, molesta o indispone a una niña es porque “siente algo por ella”.
No le digas que golpear es manera de solucionar sus problemas. tampoco que es menos hombre por no participar en un “juego de luchas”. ¡los golpes no son un juego!
No le digas que las tareas del hogar “son cosa de mujeres”.
No le digas que el rosa es un color para niñas hay demasiados colores como para que tenga que limitar sus gustos al tamaño de tu mente.