Han llegado las vacaciones de verano y con ello puede que el caos se instale en el hogar. En esta época del año los días se alargan, hay más tiempo libre y podemos llegar a desbordarnos.
Por lo cual aquí en MALU te damos 5 cosas que puedes hacer con tu familia este verano.
1. Manualidades:
Pintura, lápices, jabones, materiales reciclados e imaginación son algunos de los ingredientes para realizar estas manualidades caseras en las que esta estación es la protagonista. Figuras geométricas y sirenas para darle una segunda vida a los rollos de papel higiénico, originales peces de colores con piedras, abanicos con platos de cartón para combatir el calor.
2. Juegos:
De mesa o en el parque, los juegos son una gran oportunidad para socializar con otras personas. No estar encerrados con objetos tecnológicos es uno de los grandes desafíos de estas fechas. Para hacerlo de la forma más divertida posible, algunas actividades pueden implicar ejercicios de psicomotricidad o aplicar las matemáticas a las tareas cotidianas.
3. Planes culturales:
Visitar un museo, asistir a un musical o descubrir una exposición son sinónimo de recargar las pilas para el año académico que viene. Las vacaciones y el tiempo libre son un gran espacio para hacer esas cosas que, muchas veces, dejamos de lado a lo largo del año.
4. Ver películas y series en familia: Esta época se puede aprovechar para comenzar nuevas series, ya sea en busca de entretenimiento, para repasar idiomas o aprender cosas nuevas sobre el mundo, la historia u otros temas. Desde series infantiles, hasta otras que enseñan sobre historia o, incluso, series sobre adolescentes. La oferta de recursos audiovisuales es muy amplia y se trata de una instancia ideal de acompañamiento con cualquiera de los contenidos.
5. Cocinar en familia: Desde un inicio, este puede ser un panorama entretenido. Ir al super en familia, con sus hermanos, padres, abuelos u otros familiares, elegir frutas y verduras, puede ser un gran comienzo de día. Además de propiciar un menú saludable , podrán divertirse en la cocina.
Sumando a esto, comprar los ingredientes y pagar les puede ayudar a entender con mayor proximidad cómo funciona el proceso del comercio.